¿Por qué la elección?

Entre el thriller y el melodrama, What Ever Happened to Baby Jane? desborda las convenciones al explotar la tensión entre dos hermanas encarnadas por Bette Davis y Joan Crawford, grandes estrellas de la Edad de Oro de Hollywood. Este clásico comienza en 1917, con el nombre de la protagonista del título “Baby Jane Hudson” brillando en la marquesina de un teatro. Allí mismo, Baby Jane, niña prodigio, canta y baila, auspiciada por su padre que la acompaña con el piano, ante un público que la adora. Mientras observan desde las butacas, su madre le dice a Blanche, hermana mayor de Baby Jane: "algún día serás tú quien acapare toda la atención. Y cuando eso ocurra, quiero que intentes ser más amable con Jane y con tu padre de lo que ellos son ahora contigo".

La historia avanza hasta 1935 y la profecía de la madre cumple. Baby Jane pasó de moda y Blanche es ahora "lo más grande del cine actual", como dice un pez gordo de los estudios. Pero esto también cambia cuando Blanche queda paralítica en un accidente de auto. No está claro qué fue lo que ocurrió exactamente, ¿Jane atacó a su hermana a propósito? La intriga sobrevolará toda la película y sólo conoceremos su respuesta al final. Las hermanas se enfrentan una y otra vez con toda violencia y es casi imposible no reparar en la responsabilidad del padre, ya ausente, en la gestación de este esquema familiar competitivo y brutal.

En un eco desgarrador de la actitud de Hollywood hacia el envejecimiento de sus grandes talentos femeninos, Crawford y Davis interpretan actrices fracasadas, enloquecidas por su propia obsolescencia, unidas por el odio a sí mismas, angustiosamente conscientes de su decadencia que anuncian lo que posteriormente se conocería como el “hagsploitation”: la obsesión misógina y discriminatoria contra las mujeres mayores y su deterioro físico. Afortunadamente las memorables actuaciones de estas actrices trascendieron y, en su magnífica expresión de la locura, vemos una manifestación furiosa contra el sistema todo.